Pone los pelos de punta ver un avión de la Royal Navy pasar a solo 90ft (27,43 m) de unos parapentes y a 345mph (638,94 km/h). El piloto de parapente no tuvo tiempo de reaccionar, y un miembro del club Avon Hang Gliding and Paraglding Club lo llamó el “incidente más grave” que había conocido. El Royal Navy Hawk T1 voló tan cerca del grupo de cuatro parapentes, que uno de los pilotos sorprendidos dijo que pudo sentir el calor del motor del avión.
El piloto de parapente, Martin Harris, grabó las imágenes casi dramáticas.
Los parapentistas volaban legalmente en un área autorizada sobre Bratton Camp, cerca de Westbury, Inglatera.
El avión a reacción Hawk T1 se desvió hacia la zona de vuelo de los parapentes mientras realizaba una práctica de bombardeo. Un informe oficial reveló que al piloto de Hawk T1 no se le había dicho en su informe previo al vuelo que los parapentes estaban en el espacio aéreo no controlado próximo a su área.
El incidente que pudo haber sido dramático ocurrió el 26 de enero, pero acaba de ser hecho público por la Junta de Airproxboard del Reino Unido. Los investigadores también dictaminaron que los parapentes de movimiento lento no habrían podido moverse lo suficientemente rápido como para alejarse del avión, lo que significa que “la colisión solo había sido evitada por la providencia”. El informe recomendó que el Avon Hang Gliding and Paraglding Club y los militares mejoren su comunicación.
Fuentes: Mailonline,Mirror y UK Airprox Board